Quién se prende en esta?

Desafío MTB al Cañón del Atuel

El recorrido de esta competencia tendrá 61km. haciendo una largada simbólica por las calles de la Villa de El Nihuil, para posteriormente hacer la partida oficial desde el Boulevard en la avenida principal de ese distrito.

Ni bien los bikers comiencen a recorrer el Cañón del Atuel disfrutarán de un impresionante escenario natural, con asombrosas esculturas naturales, espejos de agua e inmensos paredones a la vera del río Atuel.

Más info: http://www.desafiomtb.com

Con "La Manada" a la vertiente

Tercer puesto para Biciar

Los grupos de MetelePedal, La Manada y Biciar participamos de la segunda edición del Rally de las Montañas y nos trajimos en el bolsillo un tercer puesto y un montón de anécdotas, viviencias y experencias.


Un recorrido agobiante, sin velocidad (al menos para nosotros los gorditos), por momentos muy técnico y por otros muy aburrido pero en definitiva con una muy buena organización y un apoyo del público que crece año a año.


Lo bueno es que el deporte está creciendo, no solo estabamos nosotros, estaba La Manada, MetelePedal y un montón de amigos que vamos conociendo y haciendo en los cerros.

Walter, la máquina, se trajo un tercer puesto, el debut de Ceferino en el rally con un tiempo excelente, el “Bocha” que corrió con bronquitis y terminó bárbaro, la gente de La Manada (párrafo aparte que fue el rastrillo del Rally ayudando a todos los giles) y bueno, siempre hay uno que llega tarde, Cristian con un tiempo horrible (3.51.53) que llegó cuando ya no había nadie.

En síntesis un día espectacular para el MTB de Mendoza, nuestro apoyo a toda la organización para que sigan haciendo este tipo de eventos y alentarlos para que sigan así.


Una de las tantas anécdotas:...

La Manada, un grupo de animales ejemplares.

Con Cefe y Cristian nos mantuvimos juntos hasta el Telegrafito. El ritmo era bueno y constante, si bien estábamos lejos del pelotón, el ritmo era el nuestro y eso era bueno. Yo podía seguirles de cerca lo cual me ponía muy bien, hasta que rompí la cadena, no había ni siquiera calentado los músculos que ya estaba sin casco con la bici dada vuelta tratando de repararla y sin muchas esperanzas. Carlos, un “extraño” de esos amigos que siempre se acercan con una solución, apareció con un cortacadenas y me ayudó a empalmar nuevamente la cadena. Estaba nuevamente en carrera y eso era estupendo.


Ya habían largado todas las categorías, y todas me habían pasado. Comencé a superar a varios, la cosa se ponía buena. Después de estar tirado y casi fuera de competencia estaba como loco pasando gente. Esto fue hasta la subida de la piedra, ahí me quemé completamente y me pasaron varios. Pero el día era un martes 13 para mí, antes de llegar al “colector”, la cadena no había quedado en buenas condiciones, se trabó y rompí el fusible. No había nada por hacer, sin fusible de repuesto y en medio del pedemonte la consigna ahora era encontrar un puesto de control o una salida rápida del circuito.


Una vez más con el casco bajo el brazo, caminando con la bici al lado pateando piedras y puteando mi suerte aparecieron en manada, como su nombre lo indica doce fieles exponentes del grupo “La Manada”. Adrián con su espíritu de “Papa Pitufo” y su optimismo ahí nomás organizó la cosa, “esperá que Pino tiene un fusible extra de GT, da vuelta la bici que lo arreglamos”. Y así fue, una vez más la “Celeste” (mi bici) dada vuelta y dos o tres tipos a cuenta regresiva poniendo un fusible nuevo, arreglando y con los toques metódicos y prolijos de Adrián que no conforme con arreglar, reguló los cambios de manera impecable.


Cinco minutos antes estaba con el “corazon partío” tratando de buscar la salida del circuito y estos animales de “La Manada” aparecieron de la nada y me pusieron de nuevo en carrera. La sensación de estar nuevamente en el circuito fue increíble. Bajamos a mil tratando de recuperar algo de tiempo y pasar a alguien pero tuvimos que hacer dos paradas por dos pinchaduras que sufrió el grupo y como siempre, todos hicieron el aguante.


Ya entrando en la mitad del circuito se me sale un tornillo del descarrilador otra vez la Celeste dada vuelta y perder tiempo tratando de arreglarla, esta vez solo. Nuevamente en carrera el hijo de Adrián pincha. La Manada estaba lo suficientemente lejos, estabamos solos en esta asique emparchamos y continuamos carrera solos.


En el último tramo, antes de llegar a la “calle” y a minutos de llegar a la meta, lo inesperado, rompí el segundo fusible de la tarde. Hicimos lo que pudimos con el hijo de Adrián. También se paró otro tipo con mucha onda que me dejó su cortacadenas (todavía lo tengo). Pero ya ni siquiera podíamos cortar la cadena como para liberar la bici y remolcarme. La gente de la organización ya venía rastrillando el circuito, asique luego de perder mucho tiempo decidimos separarnos y tomé la decisión de abandonar.


Es una sensación muy desagradable dedicar tanto tiempo y esfuerzo para no poder cumplir un objetivo. Siempre escuché que lo importante de un Rally de MTB es terminarlo. También lo repetía, como loro y sin sentirlo. Ahora se lo que es, no terminarlo.


No obstante la experiencia fue buenísima. La gente de “La Manada” no deja de sorprenderme, aún en un rally se comportan como un gran equipo, solidarios al extremo ellos la pasan bien ayudando a los demás y apoyándose entre ellos para que todos lleguen. Sin dudas creo que fue lo mejor de la carrera, el compañerismo y la amistad de estos tipos es una gran paradoja en tiempos en que lo único que importa es ganar.


Los mejores tiempos de Biciar

Tercer puesto en Master B1

WALTER B.

41

324

3

MASTER B 1

1:44:19

CEFERINO T.

27

113

101

ELITE

2:11:15

LEANDRO M.

24

108

10

ELITE

1:58:58

A Cristian, no tendríamos que ni ponerlo, pero solo por avergonzar a “La Manada"

CRISTIAN M.

27

107

22

ELITE

3:51:53